El primer ministro húngaro, Viktor Orbán, se enfrenta a un nuevo enemigo político que podría desafiar a su mandato. En solo seis semanas, Peter Magyar, el exmarido de la exministra de Justicia húngara Judit Varga, ha ganado tanta popularidad en el país que ha creado un nuevo movimiento político bajo el eslogan "Húngaro de pie".
Ahora, Magyar ha publicado una grabación de dos minutos, que fue grabada el año pasado, que supuestamente demuestra que el poderoso jefe del gabinete de Orbán, Antal Rogán, manipuló documentos relacionados con una extensa disputa por corrupción que involucraba a Pal Völner, exsecretario de Estado en el Ministerio de Justicia cuando Varga era ministro. Völner dimitió en 2021 después de que los fiscales lo acusaran de aceptar sobornos.
La sensacional publicación de la grabación, que Magyar presentó a la Fiscalía de Budapest ante un mar de cámaras el martes, es el último giro de un drama que ha paralizado a Hungría y ha proporcionado un raro momento de desacuerdo contra el férreo control de Orbán sobre el sistema político del país.
Un portavoz del Ejecutivo húngaro, Zoltán Kovács, desestimó las afirmaciones de Magyar y le acusó de acosar a su ex esposa.
¿Quién es Peter Magyar?
Según las encuestas, Magyar y su movimiento podría conseguir hasta el 13% de los votos (entre los votantes que le conocen). El nuevo políticosurgió en la vida pública húngara hace apenas un mes y medio, inmediatamente después de la dimisión de la presidenta Katalin Novák y la marcha de su exmujer Judit Varga.
En una publicación en redes sociales, Judit Varga llamó a su exmarido "abusador y narcisista" y escribió que ella misma hizo las declaraciones en la grabación como resultado del acoso que sufrió. En la grabación, Varga parece incriminar a miembros del círculo íntimo de Orbán en un escándalo de corrupción.
En seis semanas, Magyar concedió varias entrevistas importantes y reunió a más de 200.000 seguidores. El 15 de marzo, fiesta nacional en Hungría, decenas de miles de personas escucharon su discurso en el centro de Budapest.
Cuando su exmujer Judit Varga renunció abruptamente el mes pasado, el primer ministro Viktor Orbán perdió a una de sus estrellas. Varga, experta en medios, iba a liderar el partido de derecha Fidesz de Orbán en las elecciones europeas y era muy conocida en Bruselas.
Pero a medida que ella se ha ido alejando del centro de atención, su exmarido, que también es exfuncionario del partido de Orbán, se ha convertido en un gran problema para Orbán.
