El seleccionador nacional masculino de baloncesto, Sergio Scariolo, explicó que el "liderazgo tiene su propia evolución" y cómo ha podido aprender de sus jugadores mientras intenta explotar la idea de "equipo" en España en una etapa con menos talento individual pero que ha sido capaz de romper las apuestas.
Scariolo participó este jueves en la cita de 'Entre Líderes', ciclo de conferencias organizado por 'OkDiario' en Madrid, junto al seleccionador de fútbol, Luis de la Fuente, y el técnico italiano habló precisamente de "liderazgo". "El propio liderazgo tiene una evolución. Cuando empiezas crees que tienes que decidir todo, pero aprendes a escuchar", afirmó.
"Cuanto más consigues sentirte realmente como un aceite de máquina que ayuda a las piezas a encajar y que puede hacer más sencillo el trabajo de los demás, más probabilidades tienes no de ganar campeonatos pero sí de que el equipo funcione como tal. Yo he aprendido mucho de mis jugadores, puedes incorporar matices de otro tipo de liderazgo", añadió.
Así, Scariolo detalló la manera de liderar de algunos de los mejores jugadores de la historia de selección. "Pau Gasol lo era por su rendimiento. Ricky Rubio era un líder de empatizar con los demás. Rudy Fernández es un líder con capacidad de impactar, con un gesto en el campo, un grito. Felipe Reyes era un líder de ejemplo. Llull es un líder de crear el ambiente de trabajo alegre, con pasión. Sergio Rodríguez, altruismo tremendo", dijo.
"Vas aprendiendo muchas facetas diferentes del concepto liderazgo y lo haces tuyo aunque tengas tu propia personalidad", explicó. Por otro lado, el técnico de la cuatro veces campeona de Europa se refirió a su amor por el trabajo de base y cantera. "Cuando volví con la selección en 2015, me llamaron los jugadores antes que el presidente, le puse como única condición casi la de poder ocuparme un poco de la reestructuración de todas las categorías inferiores, que estaban en un momento muy complicado", afirmó.
"Yo nazco como entrenador de cantera, luego como segundo entrenador y muy pronto primero, pero me siento muy identificado con ese momento largo de mi vida y, por qué no, veo al final de mi trayectoria como entrenador jefe ese desembocar ideal como momento de diversión. Mantengo un compromiso de apoyo a las categorías inferiores y estoy casi más orgulloso del edificio que hemos podido construir paso a paso, que ha generado muchos éxitos aunque los protagonistas son los clubes que forman a los jugadores", añadió.
Con todo, Scariolo confesó que le gustaría tener más opciones en sus listas, como apuntó que sí tiene De la Fuente. "Lo nuestro ha sido lo de poder hacer que esta pirámide puede considerarse algo más único que raro. En el baloncesto, esta idea de mantener el sistema, formar a los jugadores que llegan al primer equipo sin empezar de cero porque han estado en las categorías inferiores, es algo de lo que estamos orgullosos. Hace que se genere una idea de equipo, más que selección, en el que la cantera produce los jugadores que lleguen al primer equipo", comentó.
"Siempre estamos abiertos a la sorpresa de la Liga pero no nos llevamos muchas sorpresas últimamente. Mi labor de elección es más sencilla, raramente tenemos la sensación de que hay dos jugadores que podían estar en una selección de 12 y no han estado", confesó.
Así, con el ejemplo del título continental ganado en 2022, Scariolo recordó que España necesita ser más equipo que nunca. "Hay que destacar la importancia de la química y capacidad de cohesión y unir los esfuerzos en una idea de equipo. Ahora mismo que en el baloncesto tenemos menos talento que antes, parece más evidente, es el arma más fuerte que tenemos en las manos", afirmó.
"No hay posibilidad de poder competir contra rivales que han crecido más y nosotros hemos perdido los jugadores de más talento. La única forma que tenemos que competir es llegar a ser más equipo que el resto, valores de compromiso y capacidad de llevar el sufrimiento más allá de los demás, una confianza recíproca que nos permita pedir cosas complicadas", añadió.
Además, el técnico italiano explicó que nunca tuvo problemas con las grandes estrellas, siendo peor "gente que tenía la sensación de ser una estrella y no lo era", y confió en estar en la cita olímpica de París 2024 sin querer dar un pronóstico. "Estoy curioso de ver si llegamos a clasificarnos, pero nos ha pasado que hemos sido de los que han dado dinero en las apuestas. Lo importante es mantenernos fieles a nuestra identidad", terminó.
