El piloto mexicano de Fórmula 1 Sergio Pérez (Red Bull) fue sancionado este lunes con tres puestos en la parrilla de salida del Gran Premio de España, décima prueba del calendario en el Circuit de Barcelona-Catalunya, por rodar en el GP de Canadá en su regresó a boxes con un "coche significativamente dañado".
En Montreal, Pérez hizo un trompo en la vuelta 53 de la carrera y dañó su alerón trasero al chocar con las protecciones, en un incidente provocado también por las zonas mojadas en el trazado. El mexicano regresó al 'pit lane' con el alerón posterior colgando, hecho que provocó su sanción.
Después de ser convocado por los comisarios tras la carrera en Montreal, recibió una penalización de tres puestos en la parrilla de salida del GP de España, este fin de semana en Montmeló, por continuar esa vuelta de regreso a boxes con un "coche significativamente dañado" que "perdió varias piezas de fibra de carbono".
Red Bull también fue multado con 25.000 euros por el incidente, confirmando el equipo en la audiencia posterior a la carrera que Pérez había sido aconsejado para llevar el coche de vuelta a boxes, ya que estaban tratando de evitar un Safety Car, con su compañero de equipo Max Verstappen liderando la carrera.
El mexicano 'celebró' su renovación por dos años con la escudería de la bebida energética con un fin de semana de pesadilla, para enlazar dos Grandes Premios sin puntuar de manera consecutiva, después de verse obligado a retirar en Mónaco.
"Cometí un error al entrar en la curva 6, toqué el parche mojado y una vez que lo haces se acaba el juego, y por desgracia eso es lo que pasó. Un fin de semana muy duro, pero creo que queda mucha temporada por delante y volveremos a estar como antes", valoró el piloto sobre el incidente en la página web de la F1.
