Ford Motor Company (NYSE:F) ha llamado recientemente la atención de los analistas, en particular de Morgan Stanley, que la han convertido en su primera opción en el sector automovilístico estadounidense.
Este entusiasmo surge de la evolución de la estrategia de vehículos eléctricos (EV) de Ford, que sugiere un cambio significativo con respecto a su enfoque actual. El analista Adam Jonas destaca que Ford es cada vez más consciente de la necesidad de realizar cambios sustanciales en sus estrategias en materia de vehículos eléctricos.
Se espera que la compañía reduzca sus esfuerzos de integración vertical y, en cambio, se centre en asociaciones y colaboraciones, especialmente con empresas chinas, reflejando los movimientos recientes de Tesla.
Desarrollos recientes
En un intento por abordar la decepcionante demanda de vehículos eléctricos, Ford está realizando un cambio de política significativo al poner fin a su programa de “certificación para vehículos eléctricos”. Anteriormente, este programa requería que los concesionarios invirtieran hasta 1 millón de dólares para vender vehículos eléctricos.
Para el 1 de julio, todos los concesionarios Ford serán elegibles para vender vehículos eléctricos, duplicando el número de concesionarios elegibles a 2.800. La unidad de vehículos eléctricos de Ford informó una pérdida sustancial de 1.300 millones de dólares en el primer trimestre, en contraste con la unidad Ford Blue, que experimentó un aumento del 13% en las ventas, ascendiendo a 21.800 millones de dólares.
El director financiero de Ford, John Lawler, ha esbozado una estrategia destinada a mejorar la eficiencia del capital y mejorar los márgenes de beneficio. En su intervención en la conferencia de la industria automotriz global del Deutsche Bank, Lawler enfatizó la importancia de las asociaciones y la reducción de costos.
Ford está en camino de lograr $2 mil millones en ahorros de costos este año, principalmente a través de eficiencias de materiales y fabricación.
Estos esfuerzos llegan en un momento crucial, ya que las reducciones de precios en el segmento de vehículos eléctricos han sido significativas y la empresa continúa enfrentando presiones de costos.
Los esfuerzos de Ford por mejorar la rentabilidad de los vehículos eléctricos han llevado a la empresa a buscar reducciones de costes por parte de sus proveedores. La directora de cadena de suministro, Liz Door, ha instado a los proveedores a reducir costos y garantizar operaciones de fabricación eficientes. t
Mayo de 2024 fue un mes fuerte para Ford, con las ventas de vehículos en EE. UU. aumentando un 11,2% en comparación con el año anterior. Las ventas de vehículos eléctricos aumentaron un 64,7% y las ventas de vehículos híbridos experimentaron un aumento similar del 64,5%.
Las ventas de camiones, que representan una parte importante de los ingresos de Ford, también experimentaron un aumento del 11,2%. A pesar de una ligera caída en las ventas de camionetas Serie F, el crecimiento general en las ventas de vehículos subraya la resiliencia y la posición de mercado de Ford.
Optimismo de los analistas y potencial a largo plazo
Ford también ha atraído la atención positiva de Wall Street, con Sanford C. Bernstein iniciando la cobertura con una calificación de ‘Outperform’ y un precio objetivo de 16 dólares.
El analista Daniel Roeska cree que las inversiones de Ford en vehículos eléctricos eventualmente fortalecerán su desempeño financiero, complementando su ya sólido negocio de camionetas y SUV.
La perspectiva a largo plazo de la empresa se ve reforzada por las expectativas de apalancamiento operativo y rentabilidad en la unidad de vehículos eléctricos. Además, se prevé que Ford reduzca sus previsiones para 2024, lo que podría servir como catalizador para las acciones, impulsándolas al alza en el mediano plazo.
Navegando por la valoración y las condiciones del mercado
Al evaluar la valoración de Ford, es crucial considerar tanto sus componentes automotrices como financieros. Con un flujo de caja libre ajustado de 4.400 millones de dólares en promedio, los analistas creen que la capitalización de mercado actual de Ford presenta un valor razonable, especialmente a la luz de su naturaleza cíclica.
El valor contable tangible por acción de la empresa y su balance estable respaldan aún más su tesis de inversión.
Sin embargo, dado el panorama competitivo y la dinámica del mercado, los inversores deben sopesar estos factores cuidadosamente al considerar a Ford como una inversión a largo plazo.
Habiendo explorado los acontecimientos recientes, el desempeño financiero y las iniciativas estratégicas, es hora de centrar nuestra atención en los gráficos.
Discernir la reciente acción del precio de las acciones será fundamental para comprender si Ford está a punto de caer por debajo de la marca de los 10 dólares una vez más o si puede subir más.
Oportunidad de entrada alcista a 11,80$
En el gráfico a corto plazo de Ford, podemos ver que la acción entró en una tendencia bajista después de alcanzar su máximo reciente de 13,95 dólares en abril.
Sin embargo, ha encontrado soporte cerca del nivel de 11,50 dólares, que está muy cerca del retroceso de Fibonacci del 38,2% desde el mínimo y máximo anterior de 11,30 dólares.
Esto presenta una entrada de muy bajo riesgo para los inversores optimistas sobre las acciones. Pueden comprarlo en los niveles actuales cercanos a 11,80 dólares mientras mantienen un límite de pérdidas en 11,25 dólares.
Si la acción nuevamente logra encontrar soporte por encima de 11,3 dólares, podemos verla rebotar por encima del nivel de 13 dólares en las próximas semanas, donde los operadores a corto plazo pueden registrar ganancias.
Los operadores que continúan siendo bajistas con respecto a la acción deben esperar a que caiga por debajo de 11,30 dólares, donde podrán iniciar nuevas posiciones cortas con un límite de pérdidas de 12,52 dólares y registrar ganancias por debajo de 9 dólares.
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