A un par de días de la segunda vuelta de las elecciones legislativas francesas, prevista para el 7 de julio, los adversarios de la Agrupación Nacional se esfuerzan por impedir que la extrema derecha obtenga la mayoría absoluta en la Asamblea Nacional.
Para ello, la coalición de izquierdas denominada Nuevo Frente Popular (NFP) ha anunciado que retirará a sus candidatos en las circunscripciones en las que hayan quedado terceros para apoyar a otros candidatos más fuertes opuestos a la Agrupación Nacional (RN).
Esta táctica funcionó en el pasado, cuando la extrema derecha era considerada un fracaso político, pero ¿tendrá el mismo efecto esta vez? 'Euronews' examina lo que está en juego para los bloques y los posibles resultados antes de la segunda vuelta de las elecciones.
La movilización de los electores, clave para la coalición de izquierdas
La coalición de izquierdas, formada por el partido Francia Sin Arco (LFI), los socialistas, los verdes y los comunistas, tendrá que recurrir a prácticas tácticas de voto.
"El Frente Republicano es la clave de la segunda vuelta y será decisivo para que la Agrupación Nacional consiga la mayoría absoluta de escaños", afirma Philippe Marlière, profesor de política francesa en el University College de Londres (Reino Unido).
Pero, para que este Frente Republicano sea eficaz, es necesario movilizar masivamente al electorado".
Erwan Lecoeur, politólogo y experto en extrema derecha, cree que la movilización no será tan eficaz como en años anteriores porque "gran parte del electorado de izquierdas está harto de que se le pida que haga el sacrificio y vote en contra de sus convicciones".
Esta fatiga electoral podría tener un impacto en la votación del domingo, dijo a 'Euronews'.
La alianza centrista de Macron podría debilitar al Frente Republicano
Para el partido del presidente francés, Emmanuel Macron, las instrucciones de voto han sido menos claras en comparación con la izquierda.
Algunos de sus candidatos, como el ex primer ministro de Macron , Edouard Philippe, han pedido a los candidatos que no se retiren incluso si un candidato de la coalición de izquierdas tiene más posibilidades de derrotar a un diputado de extrema derecha.
"Esta falta de claridad podría debilitar al Frente Republicano porque algunos de los candidatos en el campo presidencial todavía son reacios a llamar a sus electores a votar por un candidato de la Francia Insumisa", dijo Marlière a 'Euronews'.
Macron y los suyos han llevado a cabo una campaña estas tres últimas semanas en la que afirman que los partidos más radicales de la coalición de izquierdas, como la Francia Insumisa, son tan peligrosos para la democracia como la extrema derecha.
"Va a ser muy difícil para el bando de Macron dar marcha atrás en su estrategia de comunicación", dijo Marlière.
Otros analistas creen que la coalición centrista tendrá dificultades para forjar alianzas significativas al final de la semana.
"Incluso si se produce un repunte de la izquierda y el centro entre la primera y la segunda vuelta, las profundas divisiones y la animosidad entre el bando de Macron, Los Republicanos (partido conservador de derechas) y el Nuevo Frente Popular hacen improbable una mayoría alternativa que gobierne desde el centro", dijo Célia Bélin, responsable de política del Consejo Europeo de Relaciones Exteriores, en una declaración enviada por correo electrónico a 'Euronews'.
Lecoeur cree que al partido de Macron sólo le quedan dos soluciones. Una es que Macron acepte "un 'Gobierno de cohabitación' con un primer ministro de extrema derecha, lo que debilitará sus poderes", dijo a 'Euronews'.
Pero si la Agrupación Nacional no consigue la mayoría absoluta que lleve a un parlamento indeciso, Macron podría nombrar un Gobierno técnico para gestionar los asuntos corrientes "pero no duraría mucho", predijo Lecoeur.
Un Gobierno técnico significa que el presidente podría nombrar -con la aprobación de otros partidos- a altos funcionarios y prefectos que no tengan una inclinación política concreta para gestionar los asuntos de actualidad.
La derecha conservadora, dividida ante la Agrupación Nacional
El tradicional partido conservador de derechas Los Republicanos obtuvo el domingo el 10,2% de los votos. Quedó cuarto y sigue dividido sobre la postura a adoptar frente a la Agrupación Nacional. El partido se ha negado a dar instrucciones claras de voto a su electorado para la próxima vuelta.
Pero el eurodiputado François-Xavier Bellamy, codirector interino, afirmó que "el peligro al que se enfrenta hoy nuestro país es la extrema izquierda", en referencia a Francia Insumisa.
Florence Portelli, vicepresidenta de Los Republicanos, por su parte, declaró que "votaría en blanco".
Según Lecoeur, los resultados de las elecciones muestran que el partido lo hizo mejor de lo previsto: "Los Republicanos es prácticamente inexistente a nivel nacional, pero al igual que el Partido Socialista, tiene mucha importancia a nivel local".
"Están presentes en todas partes sobre el terreno, a diferencia del partido de Macron o incluso de la Francia Insumisa, y ahí es donde está su futuro", dijo.
